Diversos son los paisajes donde a veces los hombres encuentran libros nómadas, libros sin hogar, de paso siempre. A nadie pertenecen porque son de todos y ninguno.
Si te has cruzado con alguno de estos libros y ha seguido tu camino o si ha continuado su propio rumbo, recuerda al aviador perdido en el desierto que vio marcharse a un Principito, y no me dejes a mí en ese silencio sin saber qué te contó el libro que escribí, por dónde aún navega...


La literatura, desde tiempos de Homero, sólo es el regreso a los lugares en que perdimos el corazón...

(Gustavo Martín Garzo)

02 julio 2010

Torrelodones distrito federal


Vuelan en el silencio algunos de mis libros gracias a la generosidad de amigos infinitos, amigos inmarcesibles, sibles, sibles, na, na, na...

Unas veces recorren extranjeras latitudes, otras incognitas terras australis, otras las procelosas selvas de los institutos de enseñanza secundaria de madrid, otras el mismísimo Torrelodones, distrito federal...

Veo marcharse mis libros, observo la fotografía que se tomaron en su despedida... para luego sumirse en la desaparición, en un empecinado silencio...

Espero que estéis bien, libros, que alguien os haya leído. Siento que no me mandéis cartas, a mí que sólo creí en la literatura y sé que el hombre es hombre poruqe escribe y lee... Sí, vuestra ausencia, vuestro silencio a veces duele, si algo doliera áun...